Las siglas SEO, “search engine optimisation” hacen referencia a un conjunto de técnicas que tienen por objeto optimizar la visibilidad de una página web de resultados de búsqueda. El objetivo es mejorar el posicionamiento de una página o de un dominio en los resultados de los motores de búsqueda en base a las palabras clave objetivo, y de este modo aumentar el número de visitas a la página.

Si crear un sitio web es algo relativamente sencillo, la creación de un sitio web profesional, visible y eficaz es otra historia. Debes intentar que tu sitio web esté correctamente referenciado. Se considera que el posicionamiento de una página es adecuado si está posicionado y clasificado en la primera página de Google, es decir, entre los primeros diez resultados.  No basta, por lo tanto, con crear una página web y olvidarse; hace falta un mantenimiento permanente. Por ello, abordaremos algunos puntos interesantes para ayudarte a incrementar el tráfico de tu sitio web.

1. Construye bien la etiqueta del título

La etiqueta (<título>) es un elemento extremadamente importante de SEO, ya que permite a los usuarios localizarte en el entorno digital. Sin esta etiqueta será difícil que te encuentren. Por ello, debes ser lo suficientemente eficaz.

Es esencial que tu etiqueta (<título>) atraiga a los usuarios. Es el elemento más diferenciador y obvio en un resultado de búsqueda y, por lo tanto, una parte importante en el proceso de toma de decisión de hacer clic o no en ese resultado.

Los trucos para redactar etiquetas de título adecuadas:

  1. Pon en la etiqueta título la palabra clave principal de tu página
  2. Las etiquetas título deberán describir el contenido de tu página
  3. No rellenes tu etiqueta de título con toda una serie de palabras clave
  4. Las etiquetas de título deben ser diferentes para cada página

2. Utiliza palabras clave adaptadas

Insistimos en el adjetivo “adaptadas”, porque es ahí donde comienza todo. Circulan rumores de que basta con 300 palabras para un contenido web. No obstante, según un estudio de Backlinko, los contenidos (artículo, página principal, página de aterrizaje, etc.) que aparecen en la primera página de Google ocupan, de media, 1500 palabras. ¿Por qué? La longitud y la precisión de tu contenido muestran a los internautas, así como a Google, que vas a dar una respuesta precisa y detallada a la búsqueda que han hecho.

Una buena estrategia de palabras clave de SEO se hace en dos etapas:

  1. Definir las palabras clave adecuadas ( investigación);
  2. Colocarlas adecuadamente en el texto (ubicación y densidad)

3. Optimiza tus imágenes

Muchos de los artículos con más éxito en la red van acompañados de imágenes de alta calidad con sus respectivas etiquetas ALT. Las imágenes no solo hacen que tus páginas web sean más atractivas sino que las hacen más comprensibles.

Elige las imágenes correctas. Usa imágenes originales de alta calidad. Si seleccionas imágenes llamativas que aporten valor a la experiencia del usuario, consigues aumentar tus posibilidades de ser posicionado en las páginas de los primeros resultados. Además, la optimización de la imagen para SEO es un arte que con el tiempo, querrás dominar: el objetivo es reducir el tamaño del archivo tanto como sea posible, sin sacrificar demasiado en términos de calidad de imagen.

Por último, pero no menos importante, presta atención al texto alternativo (ALT). Este atributo proporciona una alternativa de texto para los motores de búsqueda. Por lo tanto, para cualquier imagen en tu sitio, el texto alternativo debe describir lo que contiene. Los lectores de pantalla para ciegos y deficientes visuales también leerán este texto y por lo que hacen que la imagen sea accesible a pesar de no poder visualizarse.

4. Evita duplicar contenido

Por contenido duplicado, en SEO no nos referimos a plagio, sino a un contenido que aparece en más de un lugar del entorno digital. Es importante que sepas dónde está todo tu contenido y evitar ubicarlos en varias páginas, ya que Google podría penalizarlo.

5. Optimiza tu estructura de links internos

Los enlaces internos son enlaces que van de una página en un dominio a una página diferente en el mismo dominio. Es decir, una estructura de enlaces que van de una página a otras bajo el mismo dominio.

Hay que tener dos cosas siempre en cuenta cuando se trata de enlaces internos: el texto ancla (es decir, el texto que ven los que visitan la página y sobre el que se puede hacer clic) y la línea de flotación, es decir, la línea por debajo de la cual no podemos ver el contenido sin deslizar verticalmente. Lo ideal es poner la mayoría de sus enlaces internos por encima de dicha línea de flotación, de modo que los usuarios que no se molesten en deslizar verticalmente puedan ver dichos enlaces.

6. Obtén backlinks

Un backlink (también llamado “enlace de entrada”) es básicamente un enlace externo, es decir, un enlace de otro sitio web que lo dirigirá a su sitio web. Los motores de búsqueda calculan los rankings SEO usando múltiples factores para mostrar los resultados de búsqueda, y los backlinks tienen un gran impacto en el y la determinación de la popularidad de su sitio web.

Sin embargo, ten en cuenta que todos los enlaces de retroceso no son iguales.

Un vínculo de retroceso (también llamado “enlace de entrada”) es básicamente un enlace externo, por lo que se puede obtener un enlace de otro sitio web que lo dirigirá a su sitio web. Los motores de búsqueda calculan los rankings SEO usando múltiples factores para mostrar los resultados de búsqueda, y los backlinks tienen un gran impacto en el y la determinación de la popularidad de su sitio web. En un sistema bastante simple, Google utiliza dichos enlaces para saber cuál es la página más pertinente para responder a las solicitudes de los usuarios. Pero hay que tener cuidado, no se pueden incluir ” a la ligera” backlinks, ya que no son todos los enlaces son de la misma calidad e incluso algunos pueden llegar a ser nocivos.

7. Las herramientas de SEO más efectivas

1. SEMrush

SEMrush es una herramienta de pago, pero muy potente e intuitiva. Este programa informa sobre tu posicionamiento, tus palabras clave y la calidad de tu SEO interno. La herramienta sirve para:

  • definir distintas palabras clave;
  • controlar la posición de tus distintas palabras clave;
  • verificar la calidad de tus páginas;
  • vigilar sus enlaces rotos y la calidad de los mismos.

2. Ahrefs

Si SEMrush es especialista en el seguimiento de nombres clave, Ahrefs se concentra en el backlinking y te ofrece un panorama interesante de tus distintos backlinks y de los de su competencia.

Ahrefs te permite:

  • Verificar backlinks existentes;
  • analizar los nuevos backlinks y otros perdidos;
  • Realizar comprobaciones de tu competencia.

Este programa, al igual que SEMrush, es muy completo. Así, podrás ir mucho más lejos de los tres aspectos que se han citado más arriba.

3. MOZ

Moz ofrece la posibilidad de poner nota a tu página web. Sobre una base de 1 a 100, la herramienta da una nota a la página en función de determinados criterios, como:

  • Frecuencia de visita
  • Antigüedad
  • Relevancia de los contenidos

En realidad, Moz Page Authority ha venido a reemplazar a Google PageRank, inactivo desde 2016.

Para entender un poco más:

  • Por debajo de 30, tu notoriedad es débil, o muy débil;
  • Entre 30 y 49, tu notoriedad está presente y su página web o blog es influyente, si bien sigue teniendo margen de mejora;
  • Entre 50 y 70, tu página web o blog es una referencia en internet;
  • Por encima de 70, eres imprescindible en tu sector, o en la red en general.

Espero haberte ofrecido las indicaciones necesarias para ponerte al día e impulsar tu página web en términos de SEO. Si te ha gustado el artículo, no duded en compartirlo 😉